El aumento anual de los casos de piojos y la aparición de resistencias a las terapias disponibles hacen del método que emplea sólo aire caliente para eliminarlos un tratamiento prometedor y seguro. el sistema, que puede estar disponible en uno o dos años, deberá emplearse en colegios y centros sanitarios. Es un secador, pero no uno cualquiera. Es más potente, tanto en el volumen como en la temperatura (50 grados) del aire que emite, y termina en un brazo al que se le ha incorporado un peine.
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