El tema es muy fácil:
Se cogen dos urogallos claramente diferentes el uno del otro.
Se llenan dos calderos grandes con agua.
Se agarra a los urogallos por las patas y se les mete totalmente y se les saca de los calderos repetidamente.
Hasta que uno de los dos urogallos dice: "¡¡¡Estoy de agua hasta los cojones!!!"
Se cogen dos urogallos claramente diferentes el uno del otro.
Se llenan dos calderos grandes con agua.
Se agarra a los urogallos por las patas y se les mete totalmente y se les saca de los calderos repetidamente.
Hasta que uno de los dos urogallos dice: "¡¡¡Estoy de agua hasta los cojones!!!"
Ese es el macho, ese.
P.D. Señor Tomás, cada día te añoro más
loca del coñoanalfabeta que afirmaba que los gallos violan a las gallinas.