Publicado hace 14 años por Johnleblog a quienquiereapepe.blogspot.com

Unos ciudadanos anónimos encontraron un anillo perdido hace un año y ahora están uniendo su esfuerzo a los de una fundación y otros solidarios anónimos para hacer crecer ese anillo y convertirlo en ayuda a los enfermos de Alzheimer, personas que pierden éste y otros recuerdos de gran valor sentimental. La noticia se ha difundido hoy en radio y RTVE. Un ejemplo de solidaridad original y de retos aparentemente estimulantes.

Comentarios

Lordo

¿Perdido? Es mío, él vino a mi, es sólo mío, mi tesoro.

J

Ya no queda gente así !

D

Lo correcto es llevarlo a una oficina de objetos perdidos. Que lo usen en beneficiencia no es excusa.