#2 Que hijos de puta, pero hijos de puta con mayúsculas, se llevaron la fabricación a China para joder a los trabajadores europeos y siguen haciéndolo buscando países como Marruecos, ahora que los chinos traen trabajo a Europa y les hacen la competencia en su propia casa, por que entre otras cosas no tienen capacidad de reacción por que nos han estado timando con coches caros mientras hacían caja, ahora se muestran indignados, así revienten toda esta panda de malnacidos y sus putos votantes
#9 Eso es, que bajen el precio oficial sin ofertas y hablamos. El amago de portabilidad es un puto cáncer que ha jodido el mercado completamente. Parece que contratas servicios en el rastro al regateo.
Yo estuve con un operador 20 años (igual alguno más), el motivo, tener 0 problemas, cuando empezaron los problemas estuve intentando que me diesen una solución y no hubo manera, cuando pedí la portabilidad de todos los servicios a Digi recibí una llamada que: 1) se ofrecía a pagar la instalación de Digi que no se iba a hacer, 2) mejoraba las condiciones de Digi (pero sólo durante un año, después a negociar otra vez) y 3) me hacían el cambio de cable a fibra que me habían estado diciendo que no se podía forzar y que tenía que esperar a que me llegase el turno. Les dije que me parecía aún más indignante la propuesta (porque sí había una solución inmediata que me podía ofrecer, a un cliente de toda la vida) que el hecho de que no me hubiesen podido arreglar los cortes intermitentes de conexión.
Yo estuve con un operador 20 años (igual alguno más), el motivo, tener 0 problemas, cuando empezaron los problemas estuve intentando que me diesen una solución y no hubo manera, cuando pedí la portabilidad de todos los servicios a Digi recibí una llamada que: 1) se ofrecía a pagar la instalación de Digi que no se iba a hacer, 2) mejoraba las condiciones de Digi (pero sólo durante un año, después a negociar otra vez) y 3) me hacían el cambio de cable a fibra que me habían estado diciendo que no se podía forzar y que tenía que esperar a que me llegase el turno. Les dije que me parecía aún más indignante la propuesta (porque sí había una solución inmediata que me podía ofrecer, a un cliente de toda la vida) que el hecho de que no me hubiesen podido arreglar los cortes intermitentes de conexión.