Además, según detectaron a los agentes, los nueve trabajadores cobraban menos de lo que ponía en el documento, trabajaban más horas y no tenían los días de fiesta legalmente obligatorios, haciéndolos trabajar unas 90 horas por 850 euros mensuales. Al día siguiente de la inspección, la empresa dijo a casi una veintena de trabajadores irregulares que no volvieran a trabajar. El propietario de la empresa y tres trabajadores más fueron detenidos el 6 de agosto por delitos contra los derechos de los trabajadores y por falsedad documental.
|
etiquetas: empresa , pirata , contratos , fraudulentos
No vaya a ser que se acaben las comisiones y las puertas giratorias.
hijos de puta, hay que decirlo másMe pregunto si el hijo de la gran puta pensará que es una víctima y que no le dejan emprender.
El control es una tarea que requirre personal, dinero, y apenas aporta nada, porque la mayoría teme que haya control y por tanto, cumple. Para los pocos que no cumplen, la cosa funciona hasta que salta algo, como en este caso.
El sistema se basa en la presunción que hay gente que cumple, y hay gente que hace cumplir.
Lo mismo la administración, que los jueces, que las empresas.
Pero sólo duró una legislatura, así que...