Hace 5 horas | Por cromax a diaridetarragona.com
Publicado hace 5 horas por cromax a diaridetarragona.com

Los investigados están acusados de tráfico de influencias y blanqueo de capital. La Audiencia de Tarragona ha comenzado a juzgar a cuatro de los ocho acusados en el caso del Parc Central de Tarragona, tras 31 años. La mayoría de los abogados ha solicitado la anulación del proceso en la vista de cuestiones previas de este lunes, alegando que se han vulnerado derechos fundamentales, como el de ser juzgado en un plazo razonable, debido a retrasos indebidos y la prescripción de los delitos. La instrucción comenzó en marzo de 1997, pero las primera

Comentarios

cromax

Lo meneo porque casi parece una especie de broma de la justicia. Y luego pedirán que nos los tomemos en serio.
investigados Isidoro Prenafeta, quien falleció este agosto, y otros dos empresarios que también han fallecido. En cuanto al exalcalde de Reus, Miquel Colàs, ha sido excluido provisionalmente del caso debido a su avanzada edad

WcPC

#1 Broma no, es un diseño bien ejecutado que da sus frutos.
Como se dice, la justicia es igual para todos.
Prohíbe al rico y al pobre dormir bajo un puente...
Eso si, los delitos de los ricos...
Bueno..

Mira, voy a poner un ejemplo del país donde vivo.
Aquí pillaron a la mujer de un presidente haciendo tráfico de influencias para la venta de un centro comercial y, en menos de un año tras salir del cargo estaban en la cárcel, el presidente, su mujer, su hijo mayor y su hija menor al no beneficiarse económicamente y solo haber mentido por su padre se le perdonó la cárcel...
En menos de un año...

S

#3 qué país es ese?

WcPC

#5 Taiwán.
Ahora están juzgando a uno de los que se presentaron a las elecciones (de hace unos pocos meses) porque su mujer ingresó 30.000€ y no se sabe de donde.
Eso no sería ni juzgado en España.
Juzgado y que, por si las moscas, está en detención provisional.

pingON

"ya le llamaremos" a declarar ...

g3_g3

Este es el auténtico secreto de la justicia española para poderosos y caciques locales.

blockchain

Vaya puta verguenza