#1 El sistema es de cartón-piedra. Es todo una farsa. A poco que sepas cómo funciona cualquier aspecto de este show te das cuenta de que es todo una mentira para tener a la gente engañada matándose por un plato de lentejas y a todos los responsables de todo viviendo a toda marcha y cogidos por los huevos para que sean manejables por quienes manejan los hilos que no salen en la tele, y nadie sabe su nombre).
#4#6 Al entrevistador, Gonzo, creo que le quedó un poco grande la entrevista. No fue capaz de rebatir o interrumpir a la entrevistada cuando mentía descaradamente, por ejemplo con la famosa frase de "si necesitan algo, que lo pidan" o lo del barranco del Poyo. Muy, muy decepcionante que un entrevistador permita mentir de forma tan descarada a su entrevistada.
“Las encuestas dicen que una abrumadora mayoría está en contra del cambio de hora”
Si las encuestas dijeran la verdad “¿Está usted a favor de perder una hora de luz en su tiempo de ocio y ganarla en su trabajo para siempre?” La gente se daría cuenta y saldría un rotundo NO.
Porque, no nos engañemos, lo que pretenden hacer es dejar el horario de invierno para siempre, el de verano amaneciendo a las 10 en enero es inviable, y eso implica lo que implica.
En realidad, para el ciudadano medio, el cambio de hora es una solución mucho más práctica para disfrutar de las tardes cuando hace buen tiempo, por eso la sensación general es de buen rollo cuando ponen el de verano y “por fin puedo aprovechar más la tarde”, y de “agg” ahora cuando ponen el de invierno (el que se quedaría para siempre).
Sin embargo, 40 años de telediarios rellenando minutos diciendo lo “malísimo” que es cambiar esa hora para el cuerpo ha hecho que una parte de la sociedad, la menos crítica, asuma que es tremendo sin pensar en todo esto y crea que vaya a ser bueno que la hora de luz que te quitan de tu tiempo libre, la pases en la
oficina todo el año.
En resumen, ROTUNDAMENTE A FAVOR del cambio horario, el Perro mejor se dejaba de estas cocas y miraba para la vivienda.
Si las encuestas dijeran la verdad “¿Está usted a favor de perder una hora de luz en su tiempo de ocio y ganarla en su trabajo para siempre?” La gente se daría cuenta y saldría un rotundo NO.
Porque, no nos engañemos, lo que pretenden hacer es dejar el horario de invierno para siempre, el de verano amaneciendo a las 10 en enero es inviable, y eso implica lo que implica.
En realidad, para el ciudadano medio, el cambio de hora es una solución mucho más práctica para disfrutar de las tardes cuando hace buen tiempo, por eso la sensación general es de buen rollo cuando ponen el de verano y “por fin puedo aprovechar más la tarde”, y de “agg” ahora cuando ponen el de invierno (el que se quedaría para siempre).
Sin embargo, 40 años de telediarios rellenando minutos diciendo lo “malísimo” que es cambiar esa hora para el cuerpo ha hecho que una parte de la sociedad, la menos crítica, asuma que es tremendo sin pensar en todo esto y crea que vaya a ser bueno que la hora de luz que te quitan de tu tiempo libre, la pases en la
oficina todo el año.
En resumen, ROTUNDAMENTE A FAVOR del cambio horario, el Perro mejor se dejaba de estas cocas y miraba para la vivienda.