Después de regalarle este verano a Donald Trump una placa de oro de 24 quilates, Tim Cook, máximo responsable de Apple, continuó rindiendo pleitesía al mandatario estadounidense encargándole el diseño del nuevo iPhone 17, que se presentó ayer. Donald Trump improvisó el diseño en una servilleta, en la que dibujó el boceto con bolígrafo negro, fiel a su estilo. Eligió, como no podía ser de otra manera, el naranja presidencial para la carcasa.