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#4:
Error. La paloma que caga en el tablero de ajedrez es Miguel Ángel Rodríguez.
Ayuso es la cagada.
Ayuso es la cagada.
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Error. La paloma que caga en el tablero de ajedrez es Miguel Ángel Rodríguez.
Ayuso es la cagada.
#4 La cagada diarreica de un alcoholico en fase terminal, Habia que escucharlo anteayer diciendo que en el País Vasco no habia libertad y que los niños eran perseguidos
Porque me leí hace un tiempo el libro al que referencia el autor es por lo que he querido reseñar este artículo.
Por cierto Antonio Maestre la autora turca se apellida Temelkuran no Telkumeran.
La periodista Ece Telkumeran describe en 'Cómo perder un país', su libro sobre el proceso de deterioro democrático en la Turquía de Erdogan, una analogía para explicar lo poco que sirve intentar debatir o participar en igualdad de condiciones en un proceso político de cualquier forma con personas de la moral de Isabel Díaz Ayuso. Telkumeran explica que es como intentar jugar al ajedrez con una paloma: "La paloma derribará todas las piezas, se cagará en el tablero, y luego saldrá volando, atribuyéndose orgullosa la victoria y dejándote a ti la tarea de tener que limpiar la mierda". Ayuso es la paloma que caga en el tablero. Lo hace porque existe una masa social reaccionaria que lo valida.
Menuda ida de olla el artículo.
La democracia está cerca del final de la pendiente, solo hace falta que pierdan las elecciones a final de año y veremos de qué son capaces. Y son capaces de todo.
Esta gente necesita tratamiento psicológico, no puede ser sano vivir con semejante paranoia.
#5 Lo mismo decían de Trump en los EE.UU. y de Bolsonaro En Brasil. En noviembre o, quizás, en diciembre, hablamos.
#6 Si en mayo ya estamos con estas en diciembre quien va a tener más riesgo de cometer burradas para no perder bajo ningún concepto va a ser la izquierda que cree que viene el apocalipsis.
¿Recuerdas a los de la alerta antifascista? ¿Cuántos de sus temores se cumplieron?
#6 Efectivamente hay que ser muy inocente (o querer aparentarlo) para no ver la conexión existente a escala mundial entre todos estos personajes antisistema (Trump, Bolsonaro, Urban, etc) de los que en este país forman parte Ayuso y Vox. Repiten los mismos esquemas: desinformación y desvergüenza para justificar cualquier método que les permita conseguir el poder o, en el caso de que ya lo tengan, no soltarlo.
Es un proceso que hemos visto en Turquía con Erdogán y en Hungría con Viktor Orban. En España hay muestras preocupantes de que eso está produciéndose y de que la figura más peligrosa para la democracia se llama Isabel Díaz Ayuso.
Estos de La Sexta van a tope de power con la Maria
#2 ¿Lacambra? Joder, ya ni la segunda línea debajo del titular os leéis.
Por otro lado tampoco hace falta ser un sesudo analista político para encontrar los paralelismos entre figuras como las que describe el artículo y la política ultramontana de algunos sectores del PP.
#3
Antonio Maestre
Madrid | 03/05/2023
Don Antonio Maestre, gran persona y uno de los mejores periodistas, si no el mejor de este país.
Bolaños ha cometido un gran error estratégico empoderando a una mastuerza ventrilocuamente dirigida por un alcohólico sin escrúpulos.
Contra el totalitarismo camuflado, contra el negacionismo de la realidad en sus múltiples aspectos, contra una incontenible y continua verborrea de mentiras, bulos y distorsiones de la realidad, no sirven usar las reglas democráticas.
Ayuso es la elegida por esos representantes de una derecha nostálgica, bizarra, ultramontana, cavernaria, totalitaria, casposa, déspota, delictiva, gamberra, criminal y salvaje.
En la psique de esos enfermos y desviados mentales que babean y experimentan sueños húmedos cuando presencian a esa presidenta comunitaria de ojos inquietantes ninguneando al gobierno, anida el sentimiento autodestructivo del adolescente inmaduro, del niñato hijouta que abrasa vivo a un gato porque se aburre, del niño acanallado con el síndrome del emperador y del psicópata carente de cualquier signo de empatía.
En la cabeza de estos protomonstruos camuflados el pensamiento es, en ocasiones, parecido al director nazi del campo de concentración de ese personaje de la novela: "El niño del pijama de rayas", cuando a la pregunta de su hijo: "papa, ¿quienes son esas personas que van en pijama?" El padre responde, sin atisbo de duda: "bueno, en realidad no son personas".
Es la estrategia de los ideólogos de esta derecha que se ha echado al monte arcabuz en bandolera. Hay que deshumanizar al adversario para que cualquier agravio e incluso agresión sea justificada. Así estamos.
La democracia hoy es un parado, un funcionario, un jubilado y un autónomo votando si subir impuestos.