Madrid es una isla. Una isla de calor donde a los días de bochorno asfixiante le suceden noches tórridas. En estas condiciones, buscar un plan con niños fuera de casa, sin piscina o sin recurrir al aire acondicionado de algún centro comercial, es casi una misión imposible. Y pasear al perro o dormir en la capital es todo un desafío. Eso sí, algo más fácil según el lugar en el que viva.
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etiquetas: madrid , calor , urbanismo
La eclosión de Madrid "central" (a lo parisino) en las ultimas décadas no es casual.
El PP sabe que necesita el independentismo catalán (como amenaza) para mantener y aumentar su masa crítica de votantes*. La exaltación de Madrid por parte del PP (bastión de EspaÑa), forma parte de dicha estrategia. A mucha gente le mola Madrid uno, grande y libre, especialmente después que los indepes hayan dado tanto pol culo.
Un Madrid
* Ojo, no digo que sea la única razón de voto pepera, ni mucho menos. Por supuesto también está su contraposición al "comunismo"
La gente quiere vivir en Madrid (y en Barcelona) porque hay trabajo. No porque sean el paraiso en la tierra.
Deberían ser limitados o eliminados, en muchos lugares exageran demasiado y es absurdo.
Te pones enfermo por el contraste calor sofocante fuera y cuando entras una maldita nevera.
Es una vergüenza
Si sumas restaurantes, tiendas, grandes centros comerciales, oficinas, coches, etc. etc, piensas que el hombre es lobo para el hombre.
Efectivamente aislar los edificios es importante, también generar sombra en las calles, però no sé hasta qué punto pueden arreglar el problema.
Yo, personalmente miro de tirar de… » ver todo el comentario
El otro dia lo menciona una persona de la AEMET y tienes a toda la manada derechuza intentando despedazarla por ello. La vida es mas sencilla cuando no tienes a centenares de nazis rebuznandote. Por eso muchos se callan.
El lobo no ataca a los suyos.
Los humanos somos un cancer contra todo y contra nosotros mismos.
Yo todos los días voy a la puerta del sol y me siento en una terracita bajo los toldos a disfrutar de una cervecita en libertaz.
Como ya soy cliente habitual de la terraza, en la mesa me dejan poner un retrato que siempre llevo encima del carapolla y así me siento como en casa.