A base de insistencia, presiones y amenazas, Donald Trump ha conseguido que la Unión Europea acepte un arancel del 15 % para la mayoría de sus productos exportados a EEUU, incluidos los coches. Y aunque se evitó el 30 % que asustaba a Bruselas, el daño ya está hecho. La industria del motor europeo es una de las más afectadas por esta guerra comercial, y las cifras ya empiezan a reflejarlo. Según el análisis de la aseguradora de crédito Coface, este acuerdo “desequilibrado” ha puesto en desventaja a sectores clave como la automoción.
|
etiquetas: trump , automóviles , europa , aranceles , pérdidas
Con todo, para escupir a la totalidad de un país de forma radical como haces en tu comentario, se debe de tener en cuenta cómo es o cómo ha actuado ese país respecto a otros en una situación similar.
Yo me pongo a pensar en el Imperio Británico (del cual USA se independizó), y no sé si su comportamiento como hegemón fue mejor o peor que el usano (para su propia ciudadania y para la de sus colonias… » ver todo el comentario
Ahora que ve que jugando exclusivamente con el pié, pierde el partido impone que se puede jugar también con las manos...
Stellantis vende en EE.UU. pero es lo que fabrica allí, en Méjico o Canadá, no lo que fabrica en Europa.
Segundo tiro a la economía alemana tras cortar ellos mismos su suministro de gas ruso barato y mirar a otro lado cuando volaron su futuro energético llamado Nordstream.
La unica empresa que vende bien en usa es BMW, porque en Spartanburg producen los X3, X4, X5, X6, X7 y XM que son casualmente el tipo de vehiculo que los yankis demandan. Un ejemplo magistral de como vender en usa seria el de las pickup Toyota, estan ganando a Ford.
Tienen una fiabilidad de mierda, como el resto de marcas del grupo, pero eso es harina de otro costal. Se han juntado todos los cojos de la industria a ver si, apoyándose unos en otros, caminan derechos. El resultado es cómico.
Y de todas maneras eso no va a mejorar los resultados de las marcas americanas. En Europa vamos a seguir sin importarlas. Furgonetas europeas no se vendían allí de antes, porque hay una barrera comercial que lo impide.