#2 Si te has dado por aludido es cosa tuya.
Lo único que sé es que hay un partido político y la escoria que les rodea que solo condenas las violaciones cuando los que las cometen son de una religión que no es la suya.
Que esa gente se pasa todo el día que si comen jamón, que si dejan de comerlo. Pero cuando está claro que no cuadra con su relato desaparecen por arte de magia.
#18 No. Es simplemente que ya cansa la demagogia feminasi.
¿ Cuando tu vas a un restaurante dices que estás "pagando por esclavizar" o realmente crees que el camarero y cocinero te sirven la comida porque les apetece ? No. Solo te hacen porque les pagas por hacerlo.
#2 te dejas el tema de las colillas, las latas de refresco, las de agua, los envases de embutido (si embases de embutido, verídico), pañuelos, bolsas de patatas...
En general, incluso en los pueblos (salvo que vivan cuatro gatos todo el año y en verano no vaya ni Dios), está todo que da pena.
Pero vaya, las colillas no levantan la misma indignación, y eso que las tienes por todos lados (incluso más que las mierdas de perro).
#25 Prefiero ver unas cuantas mierdas en un descampado, que un neumático viejo, un condón usado, una bolsa de basura y una montonera de escombros, si te soy sincero.
#11 Pues será donde tú vives. En mi ciudad, desde que empezaron a multar hace unos años, no ves ni una sola caca en la calle. Y mira que hay muchísimos perros.
CC. #4
#2 antes era mucho mejor, al lado de la mierda de perro estaban las jeringuillas de los heroinómanos y todo ello con el sida galopante. Los viejos tiempos siempre mejores
#24 Antes no había perros en la calles, claro que no. Ni perros ni otros animales. Y en los parques no te encontrabas jeringuillas ni nada. Muy hipoalergénico todo.
Para quien no lo conozca, el Airon lleva una de las chirigotas callejeras (que no participa en el concurso oficial) más conocidas de Cádiz. En 2023 salieron precisamente como patronos de la hostelería y llamándose Los Llorones. Fueron muy buena agrupación porque metieron el dedo en la llaga. Con lejía, y retorciendo.
#2 Bueno tampoco te flipes, que yo tuve mi infancia en los noventa y mi madre siempre se quejaba de que llegaba con mierda de perro en las zapatillas. Y ahora tengo perro y recojo todas y casa una de sus mierdas