#15 Porque lo pone en el artículo, es parte de la información que da el artículo y es una información errónea.
Y las faltas de respeto te las metes por el culo.
#5 Joder, por fin alguien lo dice. Te pillas el libro porque todo el mundo dice que es "lo básico para empezar" y en el sur de España no, para nada no. Lo básico para empezar es quitarse las ínfulas de enterao de ciudad y preguntar a los que llevan generaciones viviendo y cultivando en la misma tierra que tu piensas cultivar. Y luego, si eso, te pillas el libro porque tiene fotos muy bonitas y porque te gustan los documentales de Monesma. Y entonces ya sí, con la experiencia de varios años de cosechas de mierda, entonces sí puedes adaptarlo a tu clima y sacarle provecho.
Pero lo básico para empezar no, al menos de Madrid para abajo no, ni de coña.
#2 El problema es el que compra un coche de combustión de 40.000€ y luego se gasta 3.000€ al año en gasolina + mantenimiento. Esas personas deberían usar un eléctrico, pasarían a no tener apenas mantenimiento y un consumo de 300€ al año.
A los que se gastan 70.000€ les da igual la economía.
#1 me too
En el spectrum lo primero fue hackear los juegos, luego intentar un simulador de vuelo con las matemáticas de COU, al menos me sirvió para aprobar el álgebra de primero, demostrando que un cubo mirado por la diagonal es un hexágono.
Incluso simulé condensadores para no tener que ir al centro de cálculo de la Complu.
#1 ese zx81 en basic y luego al ensamblador con el z80!!!. A mi me queda algo para jubilarme pero todavía recuerdo esa sensación de descubrimiento que no volví a tener hasta que empecé a programar orientado a objetos y patrones
#1 A mi todavía me queda para jubilarme, pero mi primer "hito" en la informática fue programar en ensamblador del c-64 el sprite del globito que se movía por la pantalla... iba tan deprisa que parecía que no hacía nada y se quedaba en la posición final, una vez comprendí que era por la velocidad del ensamblador me lance de cabeza a la página 0 y en poco tiempo ya estaba sacando más de 8 sprites por pantalla e incluso firmando en el borde exterior de la pantalla, donde teóricamente no se podía escribir nada.
Y ahí me enganché... a mis 14 añitos... y hasta ahora, más de 40 años después trasteando con el software.