Esta táctica consiste aguardar desde primera hora de la mañana a la apertura de la piscina, para correr hacia ella y poder reservar con la toalla una tumbona o hamaca. Sin embargo, la realidad muestra escenas bochornosas y absurdas, como la que compartió Rachael, una joven inglesa de 28 años, que se encontraba veraneando en un hotel en Playa Blanca, Lanzarote.
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Dejadlos, a ver si se matan entre ellos y se extinguen.
Pues bien, ibas a la playa y estaba sola para ti y tu familia, solo estaban las familias de los pocos españoles mas que habia por alli. Daba gusto tener 50 metros de playa solo para ti y los nenes, sabiendo que mientras tanto la piscina del hotel era una guerra
En más de una ocasión se pelean a empujones.
También está la que pilla cinco tumbonas y se estira totalmente en horizontal en las cinco para guardar tumbonas al marido y los tres hijos.
Luego está el que se va llevando toallas de las tumbonas cuando cree que no le ven, pero algún vecino de tumbona avisa, o alguien de la familia le pilla y se vuelve a liar.
Solo hay que buscar "Sun bed Wars" y hay un montón que dan aún más verguenza ajena.
Esto es parte del turismo barato. En los hoteles de alta gama hay muchas menos habitaciones y tumbonas para todos. Pero claro, eso se paga.
Eah me voy...
Vacaciones para ganado.